Una nueva imagen ha revelado los impresionantes restos fantasmales de una estrella gigantesca.

La tenue estructura rosa, apropiadamente teñida de naranja dado el lanzamiento de la imagen en Halloween, es todo lo que queda de una estrella masiva que murió en una poderosa explosión hace unos 11,000 años.

Llamados Vela, los restos visibles en la imagen son suficientes por sí solos para contener nueve lunas llenas, y la nube entera es incluso más grande que eso.

Es uno de los remanentes de supernova más cercanos a la Tierra, a 800 años luz de distancia. A modo de comparación, los icónicos Pilares de la Creación cubierto con glorioso detalle a principios de este mes están a 6.500 años luz de distancia.

La imagen de Vela fue tomada por el VLT Survey Telescope en el sitio del Observatorio Paranal del Observatorio Europeo Austral (ESO) en Chile, donde se filmaron partes de la película de James Bond Quantum Of Solace.

La cámara del telescopio tiene 268 millones de píxeles y puede tomar imágenes a través de múltiples filtros para dejar pasar la luz de diferentes colores.

Su imagen de Vela se compone de 554 millones de píxeles, lo que la convierte en un fuerte competidor para tu próximo fondo de pantalla.

¿Cuál es la historia de Vela?

Cuando llega el momento de que mueran las estrellas más grandes, a menudo salen en una gran explosión conocida como supernova.

Las explosiones son tan grandes que envían ondas de choque a través del gas circundante, comprimiéndolo y creando estructuras complejas similares a hilos, como se ve en la imagen de Vela.

Estas estructuras se calientan por la cantidad de energía liberada, lo que las hace tan brillantes.

Lo que queda de la estrella es una bola ultradensa de protones y electrones, agrupados en una estrella de neutrones.

La estrella de neutrones en el remanente de Vela resulta ser algo llamado púlsar, que gira sobre su propio eje a una tremenda velocidad de más de 10 veces por segundo.