QUILLON, Chile, 7 feb (Reuters) – Las autoridades chilenas advirtieron el martes sobre una situación “muy compleja” ya que una nueva ola de calor en la región centro-sur del país amenazaba con avivar aún más las llamas de los peligrosos incendios forestales que ya se han cobrado 24 vidas.

Más de 293.000 hectáreas (724.000 acres) han sido devastadas por los incendios esta temporada, y los pronósticos de temperaturas más altas que se extienden desde Santiago hasta las regiones del sur que han sido el punto focal de las llamas han generado preocupación sobre los 82 incendios activos.

Otros 174 incendios están bajo control.

Hasta el viernes se pronostican temperaturas altas que podrían superar los 35 grados Celsius (95°F) en las regiones centrales de Maule y Ñuble, “creando una situación muy compleja en cuanto al clima”, dijo el viceministro de Gobernación, Manuel Monsalve.

Más tarde el martes, Monsalve dijo que el gobierno había confirmado que 24 personas habían muerto a causa de los incendios, revisando un número de muertes informado anteriormente de 26.

Monsalve dijo que los bomberos internacionales de Colombia y México están ayudando. Dijo que 17 personas habían sido arrestadas por posibles vínculos con el inicio de los incendios, incluidas varias por actividades como soldar o quemar ropa y lana de animales.

La calidad del aire en las áreas afectadas se ha deteriorado significativamente debido al humo de los incendios, dijo la ministra de Salud, Ximena Aguilera.

La enorme empresa chilena de celulosa y papel CMPC dijo en un comunicado el martes que más de 10.000 hectáreas (24.700 acres) de sus plantaciones habían sido afectadas por los incendios, mientras que las operaciones de algunas de sus plantas procesadoras habían sido interrumpidas.

Información de Iván Alvarado en Quillón, Chile, y Fabián Andrés Cambero en Santiago; Escrito por Valentín Hilaire; Editado por Anthony Esposito, Rosalba O’Brien y Leslie Adler

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