FERNANDA VALDES: UNA MADRE QUE SUEÑA EN GRANDE

La campeona mundial de levantamiento de pesas de Anaheim de 2017 y medallista de oro de Lima de 2019 se convirtió en madre hace menos de un año. En entrevista con Panam Sports, detalla cómo concilia ser madre y deportista de alto nivel, así como sus metas para el 2023 y el sueño que quiere alcanzar junto a su hija Rafaela, quien la acompaña todos los días a entrenar.

Cada mañana, Fernanda Valdés, campeona mundial y panamericana de levantamiento de pesas de la selección chilena, llega a entrenar al gimnasio de levantamiento de pesas del Centro de Entrenamiento Olímpico de Santiago.

Se baja de su vehículo, saca su bolso y a su hija Rafaela, de 11 meses, del asiento de bebé en la parte de atrás. Entra a la sala de pesas y pone a Rafaela en una cuna instalada justo al lado de la plataforma donde entrena.

“Rafaelita para mí lo es todo. Ella es mi motor, mis ojos, mi vida. Es un ser tan hermoso. Es tan brillante que hace felices a todos los que la ven, y estoy muy orgullosa de ser su mamá”, Fernanda Valdés le dijo a Panam Sports.

Tras un embarazo algo complicado que la obligó a dejar de entrenar antes de lo previsto, el 11 de mayo de 2022 nació la bella Rafaela.

“Mi embarazo fue caótico. Pensé que entrenaría hasta los ocho meses de embarazo, y la verdad es que tuve que dejarlo después del cuarto mes. Tenía vómitos y náuseas todos los días y tuve que dejar de entrenar. Pero todos los sacrificios valieron la pena”, dijo la campeona de los Juegos Panamericanos Lima 2019.

Reanudó la práctica apenas 15 días después de dar a luz. Sin embargo, estar sola en el gimnasio sin su hija comenzó a pasar factura.

“Al principio pensé que tenía depresión posparto, pero luego me di cuenta de que tenía que estar con ella y le dije que no me alejaría de ella, así que decidí que “ella vendría conmigo a practicar”. dijimos que teníamos que tener una cuna con todos sus juguetes para que pudiera estar feliz y segura en el dormitorio”, agrega Fernanda.

“Al principio, todavía era difícil. Fue muy intrusivo. Pero la verdad es que se ha adaptado muy bien. No llora, está feliz, le gusta estar con el equipo y cuando llega, todos se alegran de verla.

Rafaela representa la motivación más importante de Fernanda Valdés para los grandes desafíos que enfrentará en el futuro cercano.

“La preparación no fue fácil. Ha sido difícil, pero estamos progresando bien, paso a paso. Estoy dando en el blanco y en camino con mi peso corporal para clasificar a los Juegos Olímpicos de París y representar a Chile de la mejor manera posible en los Juegos Panamericanos Santiago 2023”, dijo la estrella de la halterofilia de la selección chilena.

“Mis principales objetivos son defender mi medalla de oro en los Juegos Panamericanos y clasificar a los Juegos Olímpicos de París. Y por qué no pensar en lo que llevamos tanto tiempo soñando y lamentablemente no pudimos conseguir en Tokio, que es una medalla en los Juegos Olímpicos”, añade la campeona del mundo en Anaheim 2017. “Sueño con subirme al podio. con mi Rafaela. Ahora, no sé si me dejarán, pero ella sería la más feliz de todas.

Finalmente, Fernanda, ¿qué le dirías a las mujeres deportistas que a veces tienen miedo de quedar embarazadas?

“El miedo siempre estará ahí. Para mí el embarazo fue un proceso maravilloso, creo que lo volvería a hacer. Es algo tan hermoso dar vida, y más cuando creas un ser tan hermoso como Rafaelita. No creo que debas dejar tu deporte. También conecto con mi hija y ahora somos uno en el gimnasio. Mi mensaje es que no temas, es totalmente posible ser una mamá y una atleta de primer nivel. Que sean felices, que sus bebés se diviertan al máximo. Cada día es una nueva experiencia de aprendizaje, cada día trae una nueva alegría. Soy feliz y ella es mi gran motivación para seguir siendo una deportista de élite y una buena madre.