SANTIAGO-
Al menos dos trabajadores ferroviarios murieron y otros nueve resultaron heridos el jueves cuando un tren de carga chocó de frente con otro tren durante una prueba en las afueras de la capital de Chile, un accidente fatal poco común en ese país de América del Sur.
La policía dijo que estaban investigando para determinar la causa de la colisión, que dejó el vagón de prueba completamente apoyado sobre el tren de carga. Las autoridades dijeron que arrestaron al conductor del tren de prueba y a un operador del tren para interrogarlos por cargos de homicidio involuntario.
Las fotos y videos de la escena mostraban un vagón de tren destrozado a varios pies de altura sobre un tren de carga gravemente destrozado. Dos docenas de vehículos de emergencia pululaban entre la maraña de metal aplastado mientras helicópteros sobrevolaban San Bernardo, un barrio justo al sur de Santiago, la capital. El servicio de trenes en Santiago seguía suspendido el jueves tras el accidente.
El tren de carga de ocho vagones transportaba 1.346 toneladas de cobre, el principal producto de exportación de Chile, y llevaba algunas personas a bordo, mientras que el otro tren llevaba a bordo 10 trabajadores realizando una prueba de velocidad, informó la empresa ferroviaria nacional.
Las imágenes de las cámaras de seguridad mostraron a los dos trenes viajando a gran velocidad cuando chocaron entre sí. No quedó claro de inmediato por qué el tren de prueba no fue alertado sobre la aproximación del tren de carga.
“Debemos identificar las causas y tomar las medidas correspondientes”, dijo a The Associated Press el ministro de Transporte, Juan Carlos Muñoz.
Las autoridades identificaron a las dos personas fallecidas como tripulantes del tren de carga. Otras nueve personas resultaron heridas, entre ellas cuatro ciudadanos chinos que conducían el tren de prueba. El personal médico dijo que seis personas seguían hospitalizadas, incluida una en cuidados intensivos.
Fuertes lluvias han azotado a Chile en los últimos días, provocando inundaciones que han sumergido cientos de viviendas y desplazado a miles de personas. Las lluvias habían amainado en gran medida el jueves en Santiago y no parecían haber contribuido a la colisión.
Los accidentes de trenes se han vuelto raros en Chile. El gobierno aumentó significativamente su conciencia sobre la seguridad después de una colisión en 2001 entre un tren de pasajeros y un autobús que mató a 20 personas e hirió a muchas otras. El país no ha visto ningún accidente mortal desde entonces, aunque cuatro descarrilamientos y otros accidentes en las últimas dos décadas han dejado decenas de heridos.
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