SANTIAGO, 29 dic (Reuters) – Chile dijo el martes que había registrado su primer caso de la variante británica del coronavirus, lo que llevó a las autoridades sanitarias a restablecer un período de cuarentena obligatoria para todos los visitantes que ingresen al país sudamericano desde España.

La variante, que podría ser hasta un 70% más transmisible, se ha extendido rápidamente desde Gran Bretaña, donde se identificó por primera vez, a países de todo el mundo, incluidos Pakistán, Hong Kong, Singapur, Canadá e Israel, entre otros. Más información

La subsecretaria de Salud de Chile, Paula Daza, dijo que una mujer chilena que regresó a su país de origen el 22 de diciembre dio positivo por la variante. Había viajado a Londres para visitar a su familia.

Una vez en Chile, tomó otro avión a la ciudad de Temuco, en el centro-sur. Sus movimientos provocaron una lucha entre las autoridades sanitarias chilenas para localizar a cualquier persona con la que pudiera haber contactado durante su viaje.

Daza dijo que la mujer estaba asintomática, en cuarentena y en buen estado de salud.

Sin embargo, su llegada llevó a las autoridades a imponer una cuarentena de 10 días a todos los visitantes de Chile, a partir del 31 de diciembre. Los viajeros pueden realizar una prueba PCR a partir del séptimo día del período de cuarentena. Si dan negativo, serían liberados de la cuarentena, dijo Daza.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) dice que no hay suficiente información para determinar si las nuevas variantes podrían socavar las vacunas desplegadas internacionalmente.

Información de Dave Sherwood y Fabian Cambero; Editado por Richard Chang

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